El casco histórico de Oviedo es una maravilla y muy difícil de encontrar en otras ciudades del territorio español. Tiene un sabor decimonónico, con un patrimonio histórico y artístico indescriptibles. Podemos visitar y disfrutar de sus monumentos y hablar con los ciudadanos ovetenses, amables y hospitalarios como pocos. Veamos de este casco aquellos edificios, construcciones, iglesias, casas, palacios, plazas y rincones, que pensamos no puedes ni debes perderte, refiriéndonos fundamentalmente a los más emblemáticos monumentos de carácter artístico y cultural.
Antigua Muralla Medieval
Suplemento de 1 idioma: 20 euros sobre precio total
Suplemento de 2 idiomas: 30 euros sobre precio total
Construida en principio como defensa para la ciudad, a través del tiempo perdió esta función y se convirtió en una barrera física, adosándose casas a la misma y edificios como el del Ayuntamiento, e incluso el Monasterio de San Pelayo se construyó sobre la propia muralla, que hoy todavía guarda restos de ella. Actualmente pueden verse algunos tramos de la muralla en la Plaza de Riego.
Está en la Plaza de la Catedral, en la estrecha calle de San Juan. Su frente, del siglo XVII estuvo flanqueado por dos torres, de las que solamente se conserva una de ellas. Son muy llamativos de este Palacio, el escudo de armas de los Heredia así como un espectacular centro de pilastras y columnas.
Este Casino de Oviedo, edificado en la Calle de la Rúa, en su origen fue sede para tertulias, reuniones y conferencias. Debe su nombre a una finca de recreo de la regente doña María Cristina de Borbón, llamada El Casino, dedicada a las fiestas y diversas actividades culturales. Clarín hace una interesante descripción de este Casino, en su obra La Regenta.
Es el Teatro de Ópera de Oviedo, fundado en el año 1892, donde se entregan los Premios Princesa de Asturias. Se ubicó en los terrenos del convento de Santa Clara, detrás de la calle Uría. Últimamente se le ha dotado de una preciosa iluminación exterior, que bien vale la pena que se disfrute de ella, sobre todo ya entrada la noche.
Ejemplo claro de la arquitectura civil barroca ovetense, edificado entre 1673 y 1675. En él sobresalen la fachada y la portada y en su interior un patio con columnas toscanas, con una excelente y monumental escalera de piedra. Ha sido declarado Monumento Histórico-Artístico.
Así se llamaba el general asturiano liberal. Es una pequeña plaza pero muy singular y famosa por las reuniones y charlas vecinales, sobre todo en época veraniega o durante las populares fiestas de San Mateo, en la que la música y los chiringuitos llenan este singular espacio.
Plaza histórica de Oviedo, en la que se encuentran el Ayuntamiento y la Iglesia de San Isidoro el Real. Es la más céntrica e importante de la ciudad. Su situación la hacen ser cruce de caminos del casco antiguo y ha sido llamada de muchas maneras, hasta que actualmente se la conoce con este nombre de Plaza de la Constitución.
Es otra de las plazas emblemáticas del Oviedo Antiguo. El Fontán y su plaza anexa Daoiz y Velarde son un punto de encuentro de los ovetenses y visitantes de la ciudad, con su precioso rastro y el mercado de las flores. En ella está ubicada la Casa de las Comedias, de estilo neoclásico.