Cuenca es una de las ciudades castellano-manchega más sorprendente y visitada por turistas y viajeros de todas las partes del mundo. Pasearla y patearla a cualquier hora del día supone un placer y un solaz para el espíritu y recorrerla durante las noches de los fines de semana, cuando se ilumina toda la zona monumental, te marcarán para siempre y lo recordarás con nostalgia y deseos de volver a ella.
Su rico, variado y valiosísimo Patrimonio conserva intacto su aspecto de fortaleza medieval, con sus palacios, casas señoriales, torres, iglesias, conventos, calles, plazas y pasadizos. Su casco histórico está lleno de bellos e importantes edificios civiles y religiosos de diferentes estilos arquitectónicos, levantados en su mayoría entre los siglos XII al XVIII. Recorre el siguiente trazado que te presentamos en este itinerario.
Ruinas del Castillo
Se encuentran situadas en lo más elevado de la ciudad de Cuenca. Fue una fortaleza árabe ganada por Alfonso VIII para los cristianos. De este Castillo se conservan restos muy interesantes, como la puerta de entrada, el Arco Bezudo. Fue cedido a la Inquisición en el siglo XVI y en 1812 las tropas francesas lo volaron en gran medida. Está colocado a caballo entre las dos Hoces.
Es un edificio que fue construido en Cuenca durante el siglo XVII y está situado junto al Castillo en la parte más alta de la ciudad y muy vinculado al recinto del antiguo Castillo. Ha sido utilizado durante mucho tiempo como prisión provincial.
Por este singular y artístico puente cruza el río Huécar y data de los años 1533 y 1589. Es un puente rectilíneo de 60 metros de flecha, apoyado en los pilares de arranque de sillería del puente anterior y en el centro se consolida en un puntal de hierro. Es Patrimonio Monumental de la ciudad de Cuenca y desde este lugar se pueden contemplar maravillosamente las Casas Colgadas.
La plaza Mayor de Cuenca, capital a la que se conoce como la Muy Noble, Muy Leal, Fidelísima y Heroica, está en pleno centro histórico, en el que se encuentran sus monumentos más emblemáticos. Ha sido conocida con varios nombres distintos a través de la historia. La vida social, cultural, festiva y turística se desenvuelve en torno a esta singular Plaza, de corte renacentista.
Toda la fachada de la Hoz del río Huécar tuvo Casas Colgadas, pero hoy solamente se conservan tres que fueron restauradas a principios de este siglo. Son edificios de estilo gótico popular. También se llaman Casas del Rey. Su nombre más conocido se debe a tener una parte de ellas en voladizo o grandes balcones, sobresaliendo en la alta cornisa rocosa de la Hoz del río Huécar. Actualmente una parte aloja el Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca, de la Fundación Juan March. Es Bien de Interés Cultural.