Visita por las Playas por Lanzarote

Es una Playa paradisíaca por sus limpias y cuidadas arenas blancas y por la monumentalidad de su extensión. A veces es un tanto peligrosa, debido a las corrientes, que en ella se generan. Desde ella se puede contemplar la Montaña Bermeja.

Forma una playa de seis kilómetros, ideal para los amantes del surf. El viento atrae a la zona a los practicantes del kite y windsurf. De aquí son típicas las papas arrugadas, el pescado fresco y las lapas.

Estamos ante el paraíso del relax. Las piscinas naturales alejadas del núcleo de Playa Blanca convierten esta playa en el sitio perfecto para descansar y darse unos baños refrescantes.

Esta Playa, por sus blancas arenas y por la tranquilidad de sus aguas, se presenta como un enclave ideal para familias que buscan la paz y el descanso. El mar ofrece un contraste de colores que van cambiando en función de la hora del día.

De aguas azules turquesas, es la playa más visitada por los turistas. Mide 1,2 kilómetros y su cercanía con todos los servicios turísticos la convierten en uno de los espacios más conocidos de Lanzarote.

Está situada al sureste de la Isla, en un enclave privilegiado. Debido a su arena negra, normalmente no está muy concurrida. Sus calas son espectaculares.

Es un paraje natural que ofrece un contraste precioso de colores, su mar azul, la arena blanca y las oscuras rocas convierten el entorno en un espectáculo para la vista.

Es una Playa, que tiene la arena muy limpia y cuidada. Es ideal para tomar el sol y descansar. Sus espectaculares rocas la hacen ser muy visitada. Disfrutar, cuando la marea está alta, es un placer.